Sábado, 28 de Julio de 2012.
Comenzamos la jornada del sábado en el escenario Budweiser (el principal) con el folk de ANNI B. SWEET, que rodeada por una gran banda, sigue resultándome algo sosa. Se despidió con una versión del “Take on me” de A-HA.
La música de FANFARLO me recuerda por momentos a la de TALKING HEADS; a ellos se les notaba animados e interactivos con el público, anunciando que en otoño volverían a España de gira. Interesante la variedad de sonidos con esa trompeta, el saxo, y por supuesto, cuando Cathy Claret nos deslumbraba con el violín. Este día era el mejor en el escenario principal, de hecho, vi todas las actuaciones que se desarrollaron allí.
Así, los siguientes eran los cabezas de cartel del sábado, PLACEBO. La verdad que cuajaron un gran concierto, con altibajos en el repertorio pero con gran sonido, alternando canciones más prescindibles de sus últimos discos con otros temas más míticos como “Slave to the wage”, “Teenage angst” o “Every you every me”; eso sí, yo hubiera salido más contento si hubieran tocado más canciones del primero, pero no. El grupo contó con un lleno en el recinto durante su actuación; allí no cabía un alma. El trío se acompañó para la ocasión de dos miembros extra (una violinista-teclista y un guitarra), y además, a Brian Molko se le notaba con ganas de ganarse al público, soltando en varias ocasiones parrafadas en un castellano, que además pronunciaba muy bien.
EL COLUMPIO ASESINO mostraron tener un gran directo, pero enseguida me fui de nuevo al escenario principal a ver a LA CASA AZUL, que son más de mi gusto musical.
Al proyecto de Guille Milkyway era la tercera semana consecutiva que le veía en vivo, y de lo que más disfruté fue de nuevo de esa puesta en escena mágica, con imágenes en las pantallas de las grandes divas del pop y también de miembros extras virtuales como Silvia Niza, a la que Guille le ponía el micro acercándolo a la pantalla y que parecía que estaba ahí cantando. Como en otras ocasiones, disfruté más de los clásicos como “Esta noche sólo cantan para mí”, “Superguay”, “Chiclecosmos”, “Cerca de Shibuya”, “No más Myolastan” o “La revolución sexual” (con la que cerraron), que con los temas de su nuevo álbum, que aún no consigo disfrutar al mismo nivel que sus inspirados temas de siempre.
Aunque me hablaron muy bien de CITIZENS!, llegué al final del concierto, y mi impresión fue de un “quiero y no puedo”, mucha electrónica y pop bailable, pero pocas nueces, poca inspiración en las melodías, que me resultaban muy comerciales.
Al igual que MAKE THE GIRL DANCE, que encima se anunciaba como “Live” no como “Dj Set”, pero allí lo que había era un par de tipos pinchando, por lo que me fui enseguida a ETIENNE DE CRÉCY.
No sabía qué me iba a encontrar, pero me vi sorprendido con una estructura vertical fascinante, una especie de cubo tridimensional rodeado de proyecciones geométricas sobre las aristas, y allí en medio estaba el francés Étienne Bernard Marie de Crécy, dándole a los botoncitos y haciéndonos bailar y vibrar con su espectáculo ‘Beats’n’Cubes’ que resultó ser de lo mejorcito de esta segunda jornada.
Tras ellos, fui a ver a THE ZOMBIE KIDS. No sé qué le puede ver la gente a estos tipos, porque yo salí por patas del lugar, hacia la pinchada de TWO PIAS Djs, que para no perder la línea estilística del festival, fueron demasiado ‘bakalas’ para mi gusto, por lo que me fui a casa antes de que terminaran.