En plena Semana Santa pudimos disfrutar también de programación de Microsonidos, lo cuál se agradece, a pesar de que la afluencia de público fue de las más escasas en una jornada para disfrutar de tres propuestas musicales. Llegamos tarde y nos perdimos a las locales SUDORES DE MUERTE. MONOZID eran un cuarteto de post-punk alemán, con un sonido oscuro y bastante ochentero. Muy interesantes
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. THE HOLY KISS venían de San Francisco, y aunque compartían también esos referentes góticos y siniestros, su carismático líder y hasta su música tenían más parecidos con la de NICK CAVE.
A destacar: La teatralidad y la puesta en escena de THE HOLY KISS, que tanto nos recordó a NICK CAVE.